La visión de los nuevos líderes de la UE

En la noche del jueves pasado, a puerta cerrada, 27 dirigentes de la UE nombraron un nuevo presidente europeo, el primer ministro belga, Herman Van Rompuy; y a una ministra de Relaciones Exteriores, la comisionada de comercio de Inglaterra ante la UE, Cathy Ashton.

Estas personas no muy conocidas han sido colocadas en posiciones muy poderosas por los próximos dos años y medio. Aparentemente Tony Blair no fue elegido debido a "un claro consenso entre los líderes de la UE que preferían un presidente de junta directiva que una figura presidencial". El consenso ha provocado que Van Rompuy sea tildado de "títere" (Guardian.co.uk, 20 de noviembre).

En su primera conferencia de prensa, el entrante presidente señaló que el trabajo de la UE ahora se llevará a largo plazo y que debe recordar sus raíces. También comenzó a dirigir las perspectivas hacia un gobierno mundial, comentando que, "2009 es también el primer año del gobierno mundial con la creación del G-20 en medio de la crisis financiera. La conferencia sobre el clima en Copenhague es un paso más hacia un mandato mundial de nuestro planeta" (BBC News [discurso transmitido en vivo], 20 de noviembre).

Las Escrituras indican que el poder de la bestia europea se iniciará con una confederación de naciones que trascenderá las fronteras de Europa (Sal. 83:5-8, Dn. 9:27). Parece que los comentarios del señor Van Rompuy van en camino hacia esa dirección profética.