El derrame de petróleo, los peces y las aves.

El derrame de petróleo en el golfo de México lleva siete semanas y los expertos aún no saben cuánto petróleo está saliendo a 1.500 metros bajo la superficie.

Cada vez se ven más los daños a la fauna y la flora, a la pesca y a los ingresos que generan estos recursos. Con el derrame, tanto las aves acuáticas como las poblaciones de peces están sufriendo al destruirse los estuarios costeros y santuarios de flora y fauna (cbs2chicago.com, 5 de junio; PA, 9 de junio). Estudios indican que el petróleo se extiende en columnas a centenares de metros bajo la superficie, y los científicos desconocen los daños finales para el ecosistema del Golfo (The Charlotte Observer, 9 de junio).

Hace mucho tiempo, Dios advirtió a las naciones que por causa de sus pecados, "se enlutará la Tierra, y se extenuará todo morador de ella, con las bestias del campo y las aves del cielo; y aun los peces del mar morirán" (Os. 4:3). Dios también dijo: "Asolaré vuestros santuario" (Lv. 26:31), por desobedecer sus leyes.

La codicia humana olvida buscar a Dios por ayuda y orientación. El resultado seguirá siendo muerte y destrucción hasta que el Creador regrese con poder y majestad para enseñar a los seres humanos el verdadero camino a una vida abundante. (Is. 2:2-4; Jn. 10:10). Pero Dios promete que las plagas harán que la Tierra finalmente descanse de la explotación, cuando sus habitantes sean llevados en cautiverio a otras naciones (Lv. 26:34).