Los premios Grammy envían un mensaje

El domingo pasado en Los Ángeles, los premios musicales más codiciados se entregaron en un espectáculo sin restricciones para los artistas.

El programa de este año contaba con escenas sensuales, iconografías satánicas y ocultistas, e incluso una boda masiva de muchas parejas del mismo sexo, seguida por una estrella del hip-hop. "Same Love", la canción hip-hop popular del año sobre el amor homosexual fue interpretada durante la breve ceremonia (LATimes, 27 de enero del 2014; Telegraph, 27 de enero del 2014; Telegraph, 27 de enero del 2014). Por medio de la Biblia, Dios acusa una y otra vez a las naciones de descendencia israelita por rechazar sus caminos. Él advierte: "¡Ay del que pleitea con su Hacedor!… y todos los que contra él se enardecen" (Isaías 45:9, 24). Este año más que nunca, en los premios Grammy se mostró un espíritu de "pleito contra Dios" y sus caminos, y "contra" la obediencia a las leyes de Dios. De modo conmovedor y con toda intención se mostró hedonismo y pecado a más de 28 millones de espectadores, incluso algunos comentaristas liberales se sorprendieron por algunos de los actos. Pronto, Cristo retornará y cuando muchos regresen del cautiverio experimentado debido a su rechazo a las leyes de Dios, "serán avergonzados" de sus acciones contra Dios (v. 24). La emocionante verdad es que cuando esto suceda, Dios acogerá gustosamente a su pueblo (Sofonías 3:20) y lo bendecirá nuevamente (Joel 2:18-19). Para más información sobre el juicio profetizado de Dios sobre las naciones israelitas modernas, vea nuestro programa titulado, "El inminente día del Señor". —Scott Winnail y John Bannister