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Recientemente la canciller alemana Merkel viajó a Israel con la mayoría de sus ministros del gabinete para su quinta "reunión de gabinete conjunta" desde el 2008 (Deutsche Welle, 25 de febrero del 2014).
"Los dos países firmaron una serie de nuevos acuerdos… El primero fue la aceptación de Israel de la oferta de Alemania para proporcionar asistencia consular a los ciudadanos israelíes en países donde el estado judío no cuente con una presencia diplomática. Ella [la señora Merkel] llamó a esto una ‘muestra de la confianza’ que existía entre Alemania e Israel" (ibídem). La canciller también se expresó en contra de quienes intentan boicotear a Israel por sus actividades de los asentamientos. Finalmente, el presidente Shimón Peres condecoró a la señora Merkel con el mayor reconocimiento civil de Israel, la Medalla Presidencial de Distinción (ibídem). Los funcionarios alemanes también apoyan la "solución de dos estados", donde Israel y Palestina existan uno al lado del otro en paz (ibídem). Aunque Alemania no está de acuerdo con todas las acciones de Israel, la relación entre las dos naciones se está intensificando, mientras que las relaciones entre Israel y Estados Unidos continúan enfriándose. Durante mucho tiempo las profecías bíblicas han predicho que una potencia europea del tiempo del fin liderada por Alemania llamada la "bestia", y el "rey del Norte" invadirán el Oriente Medio y tomarán control de Jerusalén (Apocalipsis 17:11-13; Daniel 11:41-42; Lucas 21:20-24). Finalmente, su líder llegará a un templo en Jerusalén y "se enaltecerá, y se engrandecerá sobre todo dios; y contra el Dios de los dioses dirá cosas horrendas [blasfemias]" (Daniel 11:29-45, LBLA). Esta bestia probablemente establecerá una presencia en la Tierra Santa antes del cumplimiento de estas profecías. Para más información sobre este tema, lea nuestro artículo, "El futuro de Jerusalén".