"Por qué los Estados Unidos se está quedando atrás del resto del mundo"

Es el título de un nuevo artículo en la revista Time (21 de julio del 2015). El artículo revela doce señales del declive de Estados Unidos, los resultados de la investigación de dos miembros de la facultad del Brooklyn College y la Universidad de la Ciudad de Nueva York.

Sus investigaciones muestran: "En general, las medidas per cápita de riqueza, salud y educación de los Estados Unidos son mediocres para una nación altamente industrializada. Los indicadores de bienestar, las percepciones de la corrupción, la calidad y el costo de los servicios básicos, también están declinando. Los gastos de asistencia médica y educación inflan los fondos de las administraciones aun cuando los resultados humanos se hunden, dicen los autores" (ibídem). Los estadounidenses ven a sus dirigentes como "algo corrupto" y "en una encuesta aparte de ciudadanos estadounidenses, muchos dijeron que los políticos no sirven a los intereses de la mayoría, y tienen prioridad por los grupos de presión empresariales y los súper ricos" (ibídem). Los autores concluyeron: "Si Estados Unidos va a ser grande de nuevo, tenemos que empezar a componer las cosas" (ibídem), algo que las profecías bíblicas revelan que no ocurrirá hasta que Cristo regrese a reinar en la Tierra. À medida que los valores seculares y ambiciones egoístas sustituyan los valores bíblicos, Estados Unidos y muchas otras naciones de descendencia israelita continuarán en descenso. Desde hace mucho tiempo la Biblia predijo que Dios quebrantará "el orgullo de vuestro poderío" a medida que quita sus bendiciones debido a la desobediencia al fin de esta era (Levítico 26:19). Dios también profetizó que, líderes seculares y religiosos equivocados y egoístas contribuirían a este descenso de la sociedad (ver Isaías 3:12; Jeremías 23; Ezequiel 34). ¡Las investigaciones modernas continúan validando las profecías bíblicas de los acontecimientos que precederán al retorno de Jesucristo! Para más información sobre este tema, lea Armagedón y después.