La desconcertante muerte de Gran Bretaña

La caída de la grandeza de Gran Bretaña ha sido relativamente rápida. La nación que gobernó el aire y las olas y ayudó a traer la victoria en dos guerras mundiales ha caído de su pináculo de poder. El New York Times escribió sobriamente: “según los expertos desconcertados Gran Bretaña está atravesando una crisis de identidad total. Se trata de un ‘país hundido’ ‘disgustado consigo mismo,’ ‘profundamente pueblerino,’ ‘que participa en un suicidio controlado’. Y estos son amigos de Gran Bretaña" (4 de noviembre de 2017). El artículo continuó: "'El sentido en el resto de Europa es desconcierto; ¿cuánto peor puede ser?’, dijo Tomas Valasek, ex diplomático eslovaco que vivió en Gran Bretaña desde hace muchos años y ahora dirige el Carnegie Europa, un centro de investigación con sede en Bruselas. 'Después del Brexit, nadie está tratando de ayudar ahora. Ellos se dieron por vencidos. Nadie en el continente realmente se preocupa más acerca de Gran Bretaña.’” Hace mucho tiempo, Dios profetizó la rápida caída de las naciones descendientes de Israel, incluyendo a Gran Bretaña (el Efraín moderno), si se apartaban de él (Jeremías 2). El profeta Isaías advirtió: "Vendrá, pues, sobre ti mal, cuyo nacimiento no sabrás; caerá sobre ti quebrantamiento, el cual no podrás remediar; y destrucción que no sepas vendrá de repente sobre ti” (Isaías 47:11). Dios también predijo la reacción de naciones vecinas y antiguos aliados: “Todos tus enamorados te olvidaron; no te buscan; porque como hiere un enemigo te herí… a causa de la magnitud de tu maldad y de la multitud de tus pecados.” (Jeremías 30:14). Si bien el declive de Gran Bretaña es sobrio, las naciones israelitas tienen un futuro sorprendente por delante. Para obtener más información lea Los Estados Unidos y Gran Bretaña en profecía.