Aumenta el hambre mundial

La escasez de alimento ya afecta a mil millones de personas, según estimación de la ONU.

La guerra, desastres naturales, pestilencias y la inestabilidad política producen escasez y aumento de precios. Casi la cuarta parte de la gente con hambre vive en el Cuerno de África, región azotada por la sequía, pero el problema afecta otras regiones. "Ningún lugar del mundo es inmune", dice Jacques Diouf, director de la Organización para agricultura y alimentación de la ONU (FAO). Informa que el problema del hambre crece más rápido que la población, tendencia que se inició hace dos años. "Todas las regiones del mundo registran un aumento de dos dígitos en el hambre desde el año pasado" (Charlotte Observer, 20 de junio).

Hace unos dos mil años, el apóstol Juan anunció los acontecimientos que culminarían con el regreso de Cristo como Rey de reyes y Señor de señores. Juan se refirió a esos sucesos como siete sellos que debían abrirse. El tercer sello muestra un "caballo negro" que representa el hambre que, junto con las guerras y las pestes, cobraría la vida de la cuarta parte de los hombres. (Ap. 6:5-6).

Esto nos pone a pensar cuando vemos la devastación causada por el hambre, y pensar que falta lo peor; porque la humanidad no encuentra soluciones. Pero todo eso terminará, y la venida de Cristo será el principio de paz y prosperidad. Los que han muerto por esos desastres no están perdidos para siempre, sino que resucitarán según el plan de Dios.