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En un estudio publicado recientemente, los investigadores determinaron que la detonación de solo 100 ojivas nucleares por parte de un país causaría un daño catastrófico, incluyendo la escasez de alimentos al otro lado del mundo (Telegraph, 13 de junio de 2018). Tal acontecimiento también traería un retroceso significativo y destrucción a la nación lance estas armas. Un investigador señaló: “simulaciones mostraron que, si Estados Unidos disparara 1,000 ojivas nucleares, morirían 50 veces más estadounidenses que los que murieron en el 9/11, incluso si no se dispararan misiles en respuesta”. Los investigadores calcularon que la cantidad de polvo y escombros arrojados al aire con solo disparar 100 ojivas “producirían como consecuencia nubes en el firmamento que cubrirían la luz del sol y causarían daño a la atmósfera”.
Hoy, nueve naciones poseen oficialmente armas nucleares y el arsenal nuclear mundial total se estima en más de 15,000 ojivas nucleares, la mayoría de las cuales están en manos de Rusia y Estados Unidos.
Pero, ¿por qué es esto significativo, y que tiene que ver con las profecías bíblicas? Jesucristo predijo que una de las señales que precedería su retorno y anunciaría “el fin de esta era”, seria el potencial para destruir toda la vida en la Tierra. Advirtió: “Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo” (Mateo 24:22). No fue hasta 1945 que el mundo vio su primera bomba nuclear, y hacia final de la década de 1950 que las naciones de la Tierra poseían suficiente capacidad de armas nucleares para literalmente destruir a toda la humanidad. Las profecías de Jesús no podrían haberse cumplido hasta entonces. Hoy vivimos en un tiempo sin precedentes cuando la humanidad tiene la capacidad de destruir la Tierra varias veces; sin embargo, la humanidad no destruirá toda carne con las armas nucleares. Jesús también profetizó: “mas por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados” (v. 22). Aunque las actividades humanas causarán una gran destrucción en el planeta antes del fin de esta era, habrá gente que sobrevivirá el caos para ver el retorno de Jesucristo y el establecimiento de su Reino en esta Tierra. Para aprender más sobre este tema, lea Armagedón… y después.