El parlamento australiano se burla de Dios

La polémica en cuestión, de si se debe legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo, sigue rondando la mesa de discusión en el Parlamento australiano.

Justo esta semana, el diputado federal Adam Bandt del Partido Verde Australiano, buscó el apoyo entre los diputados para su proyecto de ley sobre la "igualdad en el matrimonio" que planea presentar al Parlamento. Aunque varios diputados insistieron en que la definición del matrimonio no debe ser cambiada, otros parlamentarios no estuvieron de acuerdo. El diputado laborista, Graham Perrett, quien tiene dos hermanos homosexuales, hizo un llamado para eliminar "este último vestigio de discriminación" contra las parejas del mismo sexo (Ninemsn News, 18 de junio del 2012). También añadió: "Es importante recordar que Dios no escribió la ley del matrimonio… Está escrita por abogados y legisladores en tinta, no piedra" (ibídem). Esta declaración claramente alude al grabado de Dios de los diez mandamientos en piedra de Éxodo 20, en una flagrante difamación irrespetuosa a la antigua herencia cristiana de Australia. Con todo, el señor Perrett está equivocado. Dios de hecho SÍ escribió la "ley del matrimonio" desde hace casi 6.000 años, ¡mucho antes de que existieran los abogados y los legisladores! Vemos en Génesis 2 que Dios hizo una mujer, Eva, para Adán y los unió en matrimonio (vs. 21-23) y luego declaró que en las futuras uniones: "dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer" (v. 24). Desde el principio, la intención de Dios fue que el matrimonio solo fuese entre "varón y hembra" (Marcos 10:6-9). Aunque Australia comenzó como una nación temerosa de Dios, este ya no es el caso. Parece que es solo cuestión de tiempo antes de que el Parlamento australiano pase una legislación que va en contra de las leyes de Dios, lo que traerá serias consecuencias que castigarán a este país israelita. Lea nuestro folleto, Estados Unidos y Gran Bretaña en profecía para la explicación de lo que les depara el futuro a los actuales países de origen israelita.