La circuncisión masculina, ¡Dios tenía razón!

Los beneficios de la circuncisión masculina (CM) han sido impugnados por muchos en los últimos decenios, incluyendo médicos. Pero pruebas que apoyan la práctica han ido en aumento.

El mes pasado un estudio concluyente fue publicado en una revista médica. Investigadores de la Universidad de Sidney llevaron a cabo análisis cuantitativos profundos de casi 200 artículos y estudios sobre la CM. Encontraron "pruebas contundentes" que apoyan la práctica. "La circuncisión reduce el riesgo de infecciones, cáncer y otras dolencias; y debe practicarse en los niños recién nacidos" (New Zealand Herald, 8 de marzo). "Los efectos adversos son poco frecuentes (menos de un 1%), y prácticamente todos son menores y fáciles de tratar" (no hay evidencia alguna de efectos negativos mentales o psicológicos en los lactantes y niños). Estos comentaristas opinan: "La ética de la CM en infantes y la vacunación son comparables. Nuestro análisis considera que la CM es beneficiosa, segura y económica y debe realizarse de forma óptima en la infancia. En aras de la salud y el bienestar individual, debe fomentarse la educación en los padres y las medidas para facilitar el acceso" (Open Journal of Preventive Medicine). Hace casi 4000 años Dios inició la práctica con Abraham (Gn. 17:10), y ordenó al pueblo de Israel continuarla (Lv. 12:3). Aunque la CM ya no es un requisito espiritual (ver Hechos 15) siempre es un beneficio para la salud.