Las generaciones jóvenes cada vez más ateas

"Penguin Books" acaba de terminar una encuesta entre 1.000 adolescentes británicos.

Los resultados muestran que el 66% no cree que exista un Dios, 50% nunca ha orado, 47% cree que una religión organizada ya no tiene lugar en el mundo y el 59% cree que la religión ha influido negativamente al mundo. En cambio, muchos adolecentes colocaron la importancia de la familia, amigos, dinero, música y aun los programas de televisión de la vida real por encima de la fe (Mail Online, 22 de junio).

Dios ordenó a los padres y a los abuelos enseñarles a las nuevas generaciones sobre Dios y sus leyes, "para que no te olvides" (Dt. 4:9). Dios también ordenó a los padres enseñarles a toda hora a sus hijos, y que la educación religiosa debe ser el centro de la vida familiar (Dt. 6:6-9). Sin embargo, muchos padres no enseñan directamente a sus hijos, por el contrario, confían esa importante tarea a las escuelas, guarderías, televisión y medios de difusión. Estos hallazgos entre los adolescentes son graves, pero no nos sorprenden.

En un mundo donde muchas religiones enardecen a las naciones, y donde los niños crecen sin aprender acerca del poder de Dios, ¿es acaso de extrañar que muchos ni siquiera creen que existe un Dios? Es importante saber que este tiempo de ateísmo entre los jóvenes pronto llegará a su fin. Jesucristo va a regresar y dará comienzo a una época en la cual el corazón de los padres se vuelva hacia los hijos y el de los hijos hacia los padres, cuando la estructura de esta sociedad sea reconstruida (Mal. 4:4-6).