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?"Un equipo europeo dijo el miércoles [28 de marzo] que alrededor del 40 por ciento de las estrellas enanas rojas, las más comunes en la Vía Láctea, tienen un planeta llamado "Super Tierra" orbitando en una región habitable que permitiría que el agua fluya en la superficie".
¡Esto podría equivaler a decenas de miles de millones de planetas! Sin embargo, estos mismos investigadores advierten que "los mundos rocosos girando alrededor de enanas rojas no son necesariamente acogedores para las formas de vida extraterrestres. Debido a que las enanas rojas son mucho más frías que el Sol, cualquier planeta con agua líquida tendría que estar orbitando más cerca a la estrella de lo que la Tierra está del Sol. Eso significaría que estarían bañados en dañinos rayos X y radiación ultravioleta" (Reuters, 28 de marzo). La Biblia establece que es en la Tierra donde Dios está operando ahora y que un día será la ubicación para su trono galáctico (Ap. 5:10, 21:1-3). Por eso en la actualidad NO hay "otra vida allá afuera". Sin embargo, el gran Dios, por medio de su Hijo, CREÓ los cielos (Ef. 3:9; Col. 1:15-16). Dios no creó el Universo porque estaba aburrido, mas todo lo que creó lo hizo con un propósito. ¿Irá a habitarse el Universo algún día? ¿Qué pasará con esos "mundos rocosos" que podrían ser habitables si tuvieran atmósfera apropiada? ¿Cuál será el deber final de los santos? Para más información sobre este emocionante tema, vea nuestro folleto gratuito El misterio del destino humano.—Scott Winnail, John Meakin y Julius Hart