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“El gasto mundial en defensa ha aumentado por primera vez desde 2011. Según el Informe de Gastos Militares Mundiales... los países del mundo gastaron un total de US$1.68 billones (1.56 billones de euros) en armas en 2016” (Deutsche Welle, 24 de abril de 2017). Estados Unidos, China y Rusia están en las primeras posiciones en el gasto. Un experto observó: “Hoy, a diferencia de hace una década, los actores no confían en la diplomacia y las instituciones internacionales. En cambio, los países individuales están invirtiendo en armas para protegerse a sí mismos” (ibídem). “El crecimiento del gasto en Europa central puede atribuirse en parte a la percepción de que Rusia representa una amenaza mayor” (EU Observer, 24 de abril de 2017). Y en una reciente reunión: “Un alto político ruso respondió de manera agresiva... a los comentarios del ministro de Defensa del Reino Unido al sugerir que un ataque nuclear preventivo contra Rusia es una opción para Londres, alegando que en respuesta el Reino Unido sería completamente aniquilado por las armas nucleares rusas” (Newsweek, 25 de abril de 2017). El político ruso terminó sus comentarios señalando que la grandeza del Imperio Británico “desapareció para siempre” (The Independent, 25 de abril de 2017). Las tensiones políticas mundiales se están caldeando y los “rumores de guerras” están cada vez más en las noticias, tal como Cristo profetizó que sería en el tiempo del fin (Mateo 24:3-6). Si bien no es probable que estalle una guerra entre Rusia y Gran Bretaña en el futuro inmediato, Dios advierte que cuando las naciones lo abandonan y se exaltan, tienen consecuencias graves (Jeremías 2:16, 9:13-16; Oseas 9:14). Para más información sobre el futuro de occidente, y sobre todo sobre Gran Bretaña, lea Estados Unidos y Gran Bretaña en profecía.