¿Se puede conocer el secreto que ha permanecido oculto desde el principio de los siglos? "No sé quién me puso en el mundo, ni lo que es el mundo, ni lo que soy yo mismo; estoy en una ignorancia terrible de todas las cosas. No sé lo que es mi cuerpo, ni mis sentidos, ni mi alma, ni esa parte de mí mismo que piensa lo que digo, que reflexiona sobre todo y sobre sí misma; y que tampoco se conoce ella misma". Así se expresó una de las mentes más preclaras que la culta Francia ha producido en toda su historia.