Cuatro maneras de ser más agradecido

Uno de los atributos más valiosos que una persona puede tener es el agradecimiento. Tener una actitud agradecida es contagioso. Normalmente, cuando doy mis sinceras “gracias” a alguien, ellos también responden con gratitud. También es cierto que cuando un grupo de personas muestra una actitud agradecida, aquellos que comparten tiempo con ellos también se vuelven agradecidos. ¿Cómo podemos desarrollar una perspectiva más agradecida y positiva?

Consideremos cuatro formas simples pero profundas que pueden ser fuente de alegría y paz mental en nuestras vidas y que cada uno de nosotros podemos usar para ayudarnos a ser más agradecidos.

Primero, escriba en un diario las cosas por las que está agradecido. Tener una lista sencilla y concreta de las cosas por las que estamos agradecidos nos ayuda de muchas maneras, tanto ahora como en nuestra visión del futuro. Nuestra sociedad está tan acelerada que fácilmente podemos pasar por alto las cosas simples, pero un diario puede ayudarnos a identificar las cosas por las que estamos agradecidos, especialmente si estamos teniendo un día particularmente difícil o si estamos pasando por una prueba prolongada. También es de mucho beneficio revisarlo más adelante para ver si hemos tenido crecimiento en nuestro carácter.

Un diario de agradecimiento no tiene que ser un trabajo de escritura que consuma mucho tiempo. Considere tan solo tres cosas cada día por las que está agradecido. Después de un tiempo, puede aumentar el número a cinco o más. Además, trate de elegir conscientemente cosas únicas cada día para evitar el peligro de caer simplemente en la rutina.

Luego, encuentre maneras de ayudar y servir a los demás. Tendemos a definir el servicio como cualquier acción que ayude o beneficie a otros. ¿Cómo podemos servir mejor a los demás? Algunos ejemplos son el voluntariado en la comunidad, como en bancos de alimentos locales, proyectos de Hábitat para la humanidad y escuelas. Si tenemos posesiones materiales adicionales, podemos donarlas a los necesitados.

En la familia, esposos y esposas pueden servirse mutuamente diariamente por medio de diversas tareas y necesidades dentro del hogar. A veces, nuestro servicio es simplemente estar allí para alguien que está pasando por pruebas físicas o emocionales. Los desastres también son oportunidades para que las personas usen sus talentos y habilidades para aliviar la carga de otros que pueden haber sido afectados negativamente. Jesucristo nos animó a estar dispuestos a servir (Mateo 20:25–28) y a vivir nuestras vidas mostrando amor hacia nuestro prójimo (Lucas 10:27; vea también Levítico 19:18).

Comunique su agradecimiento en forma consciente y sincera. Expresar verbalmente gratitud a los demás tendrá un efecto positivo en sus vidas y en la nuestra. Dios hizo a propósito que el agradecimiento fuera un componente clave del amor que fluye. Honrar y agradecer a nuestros padres es un mandamiento con promesa de larga vida y beneficios a lo largo de múltiples generaciones (Éxodo 20:12). Podemos animar a las personas que han marcado una diferencia en nuestras vidas mostrándoles una sincera gratitud por su amor. Decirles a nuestros cónyuges e hijos “Estoy agradecido por ti” puede alegrarles el día y fortalecer nuestras relaciones. También podemos expresar nuestro agradecimiento a las personas que nos sirven en tiendas, restaurantes y otros lugares y situaciones en las que podemos recibir su atención y servicio. A menudo, estas personas son las más afectadas por las malas actitudes y las frustraciones, por lo que un simple y sincero "gracias" realmente es muy útil.

Ore con acción de gracias y dígale a Dios por qué está agradecido. Una de mis escrituras favoritas sobre este tema es Filipenses 4:6: “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias”. Nuestro Padre desea darnos cosas buenas y desea escuchar que apreciamos todo el trabajo duro y la dedicación que Él ha tenido con nosotros. A los padres y madres les gusta mucho escuchar a sus hijos expresar su gratitud y quieren oír qué los hace felices. Nuestro Padre Celestial no es diferente. Él quiere que lo incluyamos activamente en nuestros pensamientos, nuestras oraciones, nuestras palabras y nuestras obras. Incluso Jesucristo dio gracias al Padre por sus bendiciones (Mateo 15:36; 26:27).

El agradecimiento es un hábito consciente y uno de los rasgos de carácter más valiosos que un individuo puede poseer. Aquellos que son agradecidos son luces positivas en un mundo atribulado, a menudo animando a otros a ser más agradecidos con su ejemplo. Dios bendice a la nación y al pueblo que es agradecido y expresa gratitud por sus muchos dones. “Alabadle, y bendecid su nombre” (Salmo 100:4).

La gratitud es uno de los ingredientes claves tanto para una vida moral como para una sociedad moral. Lea “Colapso de la moralidad en las naciones de descendencia israelita” y vea “Cinco pasos para conocer a Dios” para comprender lo importantes que son estos valores para nuestro gran Creador.