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De acuerdo con un informe de la semana pasada: "El museo más visitado del mundo, el Louvre de París, cerrará el viernes en medio de las peores inundaciones causadas por días de lluvias torrenciales… El Sena, que atraviesa París y pasa por el Louvre, ha subido cinco metros por encima de los niveles normales. Las fuertes lluvias en toda Europa han dejado al menos 10 personas muertas, la mayoría de ellas en Alemania" (BBC, 2 de junio del 2016).
Hasta la fecha, 18 personas han muerto por las inundaciones y se pronostican más lluvia para este fin de semana (The Star, 5 de junio del 2016). En Texas: "En los últimos 60 días, aproximadamente tres pies [un metro] de lluvia cayó en el Este de Texas, cerrando parte de la Interestatal 35 cerca de San Pedro después que cayeron seis pulgadas [15 centímetros] de lluvia solo el jueves por la mañana… Más de 1.400 casas fueron afectadas por las inundaciones del río Brazos" (ABC News, 2 de junio del 2016). Mientras severas sequías y hambre afectan algunas partes del mundo, Dios promete que habrán inundaciones en otras partes: "También os detuve la lluvia tres meses antes de la siega; e hice llover sobre una ciudad, y sobre otra ciudad no hice llover; sobre una parte llovió, y la parte sobre la cual no llovió, se secó" (Amos 4:7). Dios también promete herir a las naciones de descendencia israelita con calamidades debido a su desobediencia (Deuteronomio 28:22). A medida que las naciones rechazan cada vez más a Dios, tristemente debemos esperar ver más de las condiciones climáticas extremas que estamos presenciando en la actualidad. Sin embargo, estos acontecimientos también deben mover al pueblo de Dios para que en amor: "Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su rebelión, y a la casa de Jacob su pecado" (Isaías 58:1). ¡Pulse en este enlace para saber más sobre La misión de la Iglesia de Dios!