Haití en caos

La isla caribeña de Haití se encuentra en caos a medida que los precios del combustible aumentan y el gobierno amenaza con suspender los subsidios al combustible (New York Times, 21 de septiembre de 2022). Todo esto en una nación donde la pobreza es rampante y la estabilidad gubernamental ha sido efímera durante muchas décadas. Un líder de la oposición ha pedido que cierren los bancos locales. Un conocido líder de una pandilla también pidió a los manifestantes a destituir al actual presidente y “derrocar” el sistema.

La “decisión del actual presidente de Haití de aumentar el precio de la gasolina y el diésel esta semana podría reducir las ganancias del lucrativo comercio de combustible en el mercado negro, que está controlado por grupos de élites haitianos”. En las últimas semanas, los funcionarios de aduanas de Haití han tomado medidas enérgicas contra las importaciones ilegales de drogas y armas y han aumentado los impuestos sobre los productos importados legalmente. Aunque esto ha aumentado los ingresos fiscales, también ha enfurecido a los traficantes de drogas y armas, así como a los empresarios haitianos que dependen de los ingresos de las importaciones libres de impuestos. El presidente se ha convertido en enemigo de individuos poderosos. Aunque la inflación en Haití, en general, ronda el 30  por ciento, “el costo del arroz importado aumentó un 40 por ciento, el aceite de cocina un 88 por ciento y la harina de trigo un 68 por ciento, dejando a casi la mitad de la población enfrentando una hambre severa” (MSN, 21 de septiembre de 2022).

Haití es una nación acostumbrada al sufrimiento. Pero la tasa actual de inflación en una nación que depende de las importaciones es demasiado para el ciudadano promedio. Haití es un microcosmos de cómo podría encontrarse gran parte del mundo en los próximos años, a medida que la hambruna y la inflación continúen aumentando, y los gobiernos pierdan el control. La situación en Haití revela por qué Jesucristo debe venir, para establecer un gobierno justo y perfecto. Para más información sobre los problemas que enfrentamos hoy, lean “¡Se acerca el gobierno perfecto de Dios!”