La viruela del mono, ¿la próxima plaga?

La viruela del mono tiene preocupados a los funcionarios del gobierno y de salud pública. Fue identificada por primera vez en el 1958 en un grupo de monos africanos, la viruela del mono se descubrió en humanos en el 1970. La enfermedad estuvo localizada mayormente en varias naciones de África central y occidental hasta el 2022.

Ahora vemos casos en todo el mundo: “En total, se han registrado más de 26.000 casos de viruela del mono en casi 90 países desde mayo” (YahooNews, 5 de agosto de 2022). Sin embargo, cabe señalar que el 98 por ciento de estos casos son en hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres, pero no entre mujeres homosexuales. Aunque hay un pequeño número de casos fuera de este grupo de alto riesgo, el CDC afirma: “En este momento, los datos sugieren que los hombres homosexuales, bisexuales y otros hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres constituyen la mayoría de los casos en el brote actual de viruela del mono”. La NBC publicó una historia que afirmaba que las agencias de salud pública no reconocían el papel clave de la transmisión sexual, lo que dejó a los hombres que tienen sexo con otros hombres en mayor riesgo: “Ahora, sin embargo, un grupo cada vez mayor de expertos ha llegado a creer que el sexo entre hombres en sí… es probablemente la principal causa de la transmisión mundial de la viruela del mono” (17 de agosto de 2022). Es decir, los expertos dicen que las relaciones sexuales entre hombres están directamente relacionados con un mayor riesgo de transmisión, y no simplemente por el contacto con la piel. Además, es mucho menos probable que las superficies alrededor de la persona infectada transmitan el virus (Newsweek, 5 de julio de 2022). Los funcionarios de salud pública dudan en etiquetar la viruela del mono como una enfermedad de transmisión sexual por temor a estigmatizar a la población homosexual. Sin embargo, un creciente cuerpo de evidencia médica atribuye la culpa del brote actual y virulento de esta enfermedad directamente a la actividad sexual de los hombres homosexuales.

Para la mayoría de las personas, es poco probable que la viruela del mono sea un riesgo. En general, aparentemente la transmisión requiere contacto íntimo con una persona infectada (o con su ropa de cama o ropa), al igual que con el SIDA (NBC). Como vemos, la viruela del mono parece ser otra enfermedad que no se propagaría si los humanos eligieran vivir según los mandamientos de Dios, limitando las relaciones sexuales al matrimonio entre un hombre y una mujer. Esta es también la manera más económica y rápida de detener el brote actual. Para más información sobre cómo el obedecer los diez mandamientos puede detener las enfermedades, lean “¡El SIDA se puede erradicar!”