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Este año los carteles armados en Colombia han aumentado drásticamente sus actividades de reclutamiento de niños durante la pandemia de la Covid-19 (The Guardian, 9 de noviembre de 2020). Aprovechando el aumento de la pobreza en algunas regiones colombianas, los carteles están ofreciendo pagar a las familias hasta el doble del salario mínimo para emplear a sus hijos al servicio del cartel. “Si una comunidad no tiene acceso a agua corriente, educación, espacios recreativos y otros elementos básicos, entonces el riesgo de reclutamiento de niños aumenta... Las milicias atraen a los niños con promesas de dinero en efectivo, teléfonos móviles y motocicletas.” Si las familias no están de acuerdo, los niños a menudo son presionados por la fuerza a ingresar al servicio del cartel de todas maneras.
Debido a la pandemia, miles de niños no van a la escuela y no tienen nada que hacer y para muchos, no existen opciones de aprendizaje en línea. Esto crea oportunidades para el reclutamiento de los carteles. Los gobiernos se encuentran en un dilema mientras tratan de proteger a los niños de la Covid-19 manteniendo las escuelas cerradas, y al mismo tiempo tratando de protegerlos de los carteles. Muchas familias se ven obligadas a huir de ciertas regiones para proteger a sus hijos.
Las acciones de los carteles de droga en Colombia y los organismos paramilitares tales como Boko Haram en África, claramente demuestran un trágico desprecio por la vida humana, especialmente por la vida de los niños. Estos grupos demuestran características que son exactamente opuestas a las de Dios, quien ama a los niños. La Biblia revela que cuando Jesucristo regrese para establecer su Reino en la Tierra: “se multiplicará la paz de tus hijos” (Isaías 54:13). Los niños ya no nacerán en un mundo en donde “estarán condenados a la desgracia” (Isaías 65:23, NTV). En ese tiempo, los niños ya no vivirán con temor, porque Jesucristo habrá regresado y quitado al dios de este siglo (Efesios 2:2; Zacarías 14:9). Al ser testigos del trágico sufrimiento de los niños hoy, tenemos que recordar que se acerca un tiempo mejor. Para más información sobre los días alentadores que se avecinan, lean “¿Hay alguna esperanza?”