Rod McNair | El Mundo de Mañana

Rod McNair

¿Están muriendo las iglesias?

¿Qué le depara el futuro al cristianismo moderno de nuestras naciones occidentales? ¿Se extinguirá por completo? Hay respuestas. Todo lo que tenemos que hacer es abrir nuestra Biblia para encontrarlas. Y en el camino, incluso podríamos descubrir algunas cosas sorprendentes sobre este tema que usted nunca ha oido. Asi que, profundicemos y encontremos respuesta a esta pregunta: ¿Están muriendo las iglesias? ¡Acompáñenos!

¿Por qué Alemania es importante en la profecía del tiempo del fin?

¿De dónde proviene Alemania? Cuando Alemania revirtió su política pacifista y decidió apoyar a Ucrania, muchos fueron sacudidos., ¿Por qué Alemania, después de tantas décadas, cambió dramáticamente de dirección? La respuesta está en comprender el origen de la nación alemana actual.

¿Ansiedad por los teléfonos inteligentes? ¡Lee un libro!



A muchas personas les cuesta controlar el uso del celular. ¡Nuestro deber es ayudar a la familia a dominar esta poderosa tecnología!

A veces quizá sentimos que es una lucha controlarnos con el teléfono. ¿Nos estaremos dejando controlar por este? Ahora que los dispositivos electrónicos manuales se van introduciendo en cada rincón de nuestra vida, no es sorprendente que la respuesta sea afirmativa. Sabemos que el teléfono inteligente es diseñado intencionalmente para enviciarnos.

La familia de hoy y del mañana: Únete a la empresa familiar



Jesucristo hizo la obra de su Padre aquí en la Tierra,

y Dios llama a sus discípulos a hacer lo mismo.

¿Estaremos preparándonos para la gloriosa labor que nos espera?

Los mansos heredarán la Tierra, gobernarán como reyes y sacerdotes, y servirán eternamente como “columnas” en la casa de Dios. La Biblia muestra a los discípulos haciendo todas estas cosas. Pero, ¿realmente qué significan para el futuro de los seguidores de Dios, los llamados escogidos y fieles?

Peligro de la pornografía



La pornografía está pudriendo el alma del mundo.

Pero hay esperanza para quienes estén esclavizados.

Se puede comenzar inocentemente: una mirada, un vistazo… un golpe de excitación. Luego otra mirada. Un momento de curiosidad se convierte en fascinación. Va atrayendo a la persona, empezando a hundirla en las arenas movedizas de la culpabilidad y la vergüenza. Una vez se convierte en dos veces, luego en tres. Un minuto se convierte en una hora. Una diversión momentánea se convierte en un hábito, que se arraiga durante meses y años.

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