Para hacer una búsqueda avanzada (buscar términos específicos), escriba juntamente los criterios de interés como se muestra en los siguientes ejemplos:
Actualmente estamos siendo bombardeados con malas noticias. A veces, me estremezco al abrir una aplicación de noticias porque suele estar llena de titulares preocupantes. La pandemia de la COVID-19 parece haber intensificado muchos problemas ya existentes, y como se ha mostrado en muchos artículos recientes, el ciclo continuo de noticias estresantes ha provocado un mayor sufrimiento por estrés, ansiedad y depresión.
Algunas figuras públicas, como el capitán de los Dallas Cowboys, Dak Prescott, han comentado sobre sus luchas con la ansiedad y la depresión. Un factor importante que conduce a este aumento en la lucha por la salud mental y emocional, como se informó en un artículo de la Associated Press, es el sentimiento de desesperanza. Muchos se sienten desesperanzados y tristes. El "aquí y el ahora" y el futuro son deprimentes, oscuros y sin esperanza para muchos. Sin embargo, hay buenas noticias.
Hay una esperanza gloriosa para aquellos que creen en el Dios de la Biblia y en Su Hijo Jesucristo. Tener esto presente puede ayudarnos a enfrentar el estrés y la ansiedad que afectan a tantas personas.
Se trata del mensaje principal de Jesús mientras predicaba en la Tierra. Su Padre lo envió específicamente a predicar el evangelio del reino de Dios, como leemos en Lucas 4:42–43 “Cuando ya era de día, salió y se fue a un lugar desierto; y la gente le buscaba, y llegando a donde estaba, le detenían para que no se fuera de ellos. Pero él les dijo: Es necesario que también a otras ciudades anuncie el evangelio del reino de Dios; porque para esto he sido enviado”. Marcos 1:14 muestra que el evangelio del reino de Dios fue uno de los primeros temas de Su ministerio terrenal: "Después que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el evangelio del reino de Dios". El reino de Dios también fue el tema de muchas de las parábolas de Jesús. No solo predicó acerca del reino, sino que también instruyó a sus discípulos a que hicieran lo mismo (Lucas 9:2), y lo hicieron poderosamente (Hechos 8:12; 20:25; Gálatas 5:21).
El mensaje sobre el reino de Dios no solo se encuentra en el Nuevo Testamento; el Antiguo Testamento también contiene muchas profecías al respecto. Algunos ejemplos son Daniel 2:37–45, Isaías 2:2–4 y Zacarías 14:8–21.
La palabra "evangelio" literalmente significa "buenas nuevas". El reino de Dios no es solo una buena noticia, ¡es una maravillosa noticia! Cuando Cristo regrese al sonido de la séptima trompeta, Él establecerá el Reino de Su Padre y gobernará sobre las naciones y los gobiernos de la Tierra. Apocalipsis 11:15 describe este magnífico momento: “El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos”.
El Reino de Dios se establecerá bajo la poderosa mano de Jesucristo, mientras gobierna y sirve a la humanidad como su Consejero, Dios Fuerte y Príncipe de Paz (Isaías 9:6). La grandeza, abundancia y paz del reino de Dios nunca terminará (Isaías 9:7), y se basará en la ley perfecta de Dios, que restaura todas las cosas (Miqueas 4:2; Salmo 19:7). Será un momento en que los desiertos realmente florecerán como una rosa. Cuando Jesucristo sane al mundo, los ciegos verán cosas gloriosas, los sordos oirán y los cojos bailaran las canciones cantadas por aquellos que alguna vez fueron incapaces de hablar. Los ríos tendrán agua fresca, los animales salvajes serán domesticados y hermosas plantas y árboles renovarán el mundo (Isaías 11, 35). Y estos eventos no son solo “palabras bonitas”, son los cambios que Jesús prometió traer en un futuro no muy lejano.
Nuestros días y semanas, nuestros televisores y periódicos, nuestras computadoras y dispositivos móviles, están llenos de eventos, historias y opiniones estresantes. Pero, a pesar de todo esto, la Biblia advierte que se avecina algo peor. Jesús predijo la Gran Tribulación, el peor momento en la historia de la humanidad antes de Su regreso (Mateo 24:21). Él no le puso una capa de "azúcar" a las malas noticias, pero si predicó de manera inspiradora y nos recuerda a menudo que, por muy malas que sean, las buenas noticias son muchísimo mejores.
Un día, la gloria y la grandeza del reino de Dios eclipsarán por completo las malas noticias de hoy, y como dijo el apóstol Pablo, “Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse” (Romanos 8:18).
Si desea saber más sobre el reino de Dios y el maravilloso futuro que Dios ha planificado para la humanidad, solicite nuestro folleto gratuito El maravilloso mundo de mañana: ¿Cómo será? También puede ver nuestro inspirador programa de YouTube El misterio del reino de Dios en nuestro sitio web. Estos recursos gratuitos pueden ayudarlo a encontrar alegría y esperanza durante estos tiempos difíciles.