El cólera mata a miles en Yemen

En los últimos cinco meses, la mortífera enfermedad diarreica conocida como cólera ha infectado a más de medio millón de personas y hasta ahora ha causado la muerte de unas 2.000 personas, en su mayoría niños y ancianos (Deutsche Welle, 14 de agosto de 2017). La enfermedad es el resultado de agua y alimentos contaminados por las aguas sucias y residuales. Tristemente, no hay suficiente agua limpia para mejorar las condiciones que están causando la epidemia, y no hay suficientes médicos u hospitales para tratar a los enfermos. La tragedia humana que está ocurriendo en Yemen es el resultado de hombres que intentan ganar poder sobre otras personas por medio de la guerra (Santiago 4:1-4). Sin embargo, la destrucción y la pérdida de vidas causadas por la guerra impactan más que la de los soldados que luchan en las batallas. La epidemia de cólera es solo uno de los muchos horrores de esta pequeña guerra sucia. Las buenas nuevas son que Jesucristo va a regresar y poner fin a la guerra (Isaías 2:2-4) y traerá sanidad a las personas y lugares que han sido devastados por las violentas acciones humanas (Isaías 35:4-7). Para conocer más acerca de este emocionante futuro, lean “¿El fin de las guerras?”