El futuro incierto de Siria

El presidente de Siria, Bashar al-Assad, dimitió recientemente a su cargo como líder de la nación y huyó del país, poniendo fin a un brutal reinado familiar de 54 años. Las fuerzas de la oposición pusieron fin a 13 años de guerra civil al tomar finalmente importantes bastiones y a la propia Damasco. El colapso del gobierno de al-Assad parece coincidir con la disminución del apoyo de Rusia, Irán y Hezbolá. En su ausencia, las facciones rivales ahora buscan el poder en el país. Esta división entre los aspirantes a líderes puede impedir la estabilidad futura en Siria.

Con la salida del expresidente al-Assad, se abrieron muchas de las prisiones y se liberaron a los presos políticos (Al Jazeera, 9 de diciembre de 2024). Muchas de estas personas habían desaparecido sin dejar rastro durante el régimen de al-Assad. Los combatientes y los trabajadores humanitarios siguen “encontrando prisioneros abandonados, abriendo celdas secretas, e incluso encontrando la ubicación de instalaciones secretas”.

Aunque las naciones europeas se muestran cautelosamente optimistas sobre el futuro de Siria, varias naciones también han suspendido las solicitudes de asilo de los sirios mientras se estabiliza la situación (France24, 9 de diciembre de 2024). Europa y Estados Unidos han centrado su atención en evitar un vacío de liderazgo en la nación que pudiera permitir el regreso del Estado Islámico al poder y la influencia.

La realidad de derrocar a un régimen despótico en cualquier región del mundo es que se requiere un enorme trabajo para evitar que surja algo aún peor para ocupar su lugar, y no hay garantías de éxito. Esto difiere de la destitución final de los regímenes mundiales que ocurrirá con el retorno de Jesucristo a la Tierra. Él regresará como Rey de reyes e inmediatamente establecerá el gobierno de Dios, el cual se extenderá para cubrir todo el mundo y no tendrá fin. Esto se hará de acuerdo con un plan que tiene el éxito garantizado. Para mayor información acerca de este emocionante futuro, lean “¡Se avecina un gobierno mundial!”