Pregunta y respuesta

Pregunta: En el Evangelio de Mateo, Jesús dijo que el día del juicio sería "más tolerable" para los pueblos de Sodoma y Gomorra y de Tiro y Sidón que para los que oyeron y rechazaron su mensaje cuando Él predicó en la Tierra. ¿Cómo puede ser? Si aquellas personas ya fueron juzgadas y condenadas, ¿cómo les puede ir mejor a unas que a otras en el día del juicio?

Respuesta: Dios destruyó a Sodoma y Gomorra convirtiéndolas en ejemplo y advertencia "alos que habían de vivir impíamente" (2 Pedro 2:6). El incidente ocupa un lugar en el plan divino para la humanidad, aunque la mayoría de las personas lo ignoran. Cuando Jesús dijo que el día del juicio sería "más tolerable" para Sodoma y Gomorra y para Tiro y Sidón (Mateo 10:15; 11:22, 24), estaba revelando que los residentes de esas ciudades no habían tenido una primera oportunidad de entender su mensaje.

¿Cómo se explica? Debemos reconocer, tal como lo explica el Nuevo Testamento, que hay tres "eras de juicio" para la humanidad. El apóstol Pedro describió la primera época de juicio, que la mayoría conocemos: "Es tiempo de que el juicio comience por la casa de Dios; y si primero comienza por nosotros, ¿cuál será el fin de aquellos que no obedecen al evangelio de Dios?" (1 Pedro 4:17).

Esta es la "era de la Iglesia", o el primer período de juicio. Pedro dijo que la Iglesia es "la casa de Dios", compuesta por verdaderos cristianos cuyos ojos se han abierto para entender el mensaje de Cristo. Jesús tiene a sus discípulos por responsables de este conocimiento y espera que produzcan fruto espiritual (Mateo 25:14-30; 2 Pedro 1:1-9; Juan 15:1-10). Los verdaderos cristianos son juzgados en esta vida por sus obras y su obediencia a la Palabra de Dios (1 Pedro 4:17; Apocalipsis 22:12).

El siguiente período de juicio es la "era milenaria". La profecía bíblica muestra que Jesucristo regresará pronto a establecer su Reino en la Tierra por mil años (Apocalipsis 20:2-6). Entonces todas las naciones subirán a Jerusalén, sede del gobierno de Cristo, para ser instruidas (Isaías 2:1-4). El mundo entero conocerá la verdad maravillosa y el camino perfecto de Dios: "Porque la Tierra será llena del conocimiento del Eterno, como las aguas cubren el mar" (Isaías 11:9). Durante esa era, Dios escribirá sus leyes justas y santas en el corazón de las personas por medio de su Espíritu (Hebreos 8:10-12). Las personas serán juzgadas por su obediencia a la Palabra de Dios, lo mismo que en la "era de la Iglesia".

El tercer y último período de juicio podría llamarse la "era del juicio final". El libro del Apocalipsis lo describe como un juicio delante de un gran trono blanco (Apocalipsis 20:11-12). En esa era, los miles de millones de seres que vivieron y murieron sin conocer la verdad de Dios y su camino resucitarán a la vida física (Ezequiel 37:1-14). Por primera vez abrirán los ojos ante la verdad y tendrán su primera oportunidad de salvación.

La palabra griega para "libros" en Apocalipsis 20:12 es biblion. Estos "libros" (la Biblia) serán abiertos (Lucas 24:32) para que sean comprendidos por los miles de millones que vivieron y murieron antes del milenio sin haber entendido el verdadero evangelio de Jesucristo.

Jesucristo explicó que en el futuro los habitantes de Nínive y la Reina del Sur resucitarían junto con el pueblo de su época y que condenarían a los de la época de Jesús que rechazaron su mensaje (Mateo 12:41-42). ¡Piense en la magnitud del tiempo de juicio que Jesucristo menciona aquí! Miles de millones de personas que vivieron durante los milenios de historia humana volverán a la vida al mismo tiempo, y juntas aprenderán el camino de Dios y podrán compararlo con la vida que llevaron antes sin el conocimiento Dios.

En este tiempo muchos creen, erróneamente, que Dios es, o bien un ser caprichoso capaz de condenar a millones que no pudieron escuchar su mensaje, o bien que es inconsecuente, pues concede la salvación a algunos que ni siquiera oyeron su mensaje. La verdad es algo mucho más lógico e inspirador. Para aprender más sobre el plan de Dios para toda la humanidad, le invitamos a solicitar nuestro folleto gratuito: ¿Es este el único día de salvación?