| El Mundo de Mañana

¿Cómo podría afectar a Europa la reelección de Trump?



El optimista canciller de Alemania, Norbert Röttgen, recientemente “hizo una severa advertencia sobre el futuro de las relaciones transatlánticas, diciendo que la reelección de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos podría poner en peligro la alianza y abrir la puerta para que China y otras potencias intenten llenar el vacío” (Politico, 28 de septiembre de 2020).

La esponja: Un genio sin cerebro



Para la mayoría de nosotros, una esponja es un simple objeto de uso casero. Gracias a su suavidad y absorción, las esponjas sirven para limpiar el cuerpo, los pisos y la losa o para aplicar pintura a las paredes. Aunque hoy suelen fabricarse de algún material sintético, las esponjas siempre se han extraído de los mares; son cuerpos desecados de unos invertebrados acuáticos.

Preguntas y respuestas - Predicar el evangelio es la comisión de Jesucristo a su Iglesia



Pregunta: ¿Por qué El Mundo de Mañana se concentra en los sucesos del tiempo del fin más que en el evangelio? ¿No es perjudicial para un cristiano de hoy en día su enfoque apocalíptico?

Respuesta: El Mundo de Mañana sí tiene su principal atención en el evangelio que Jesús predicó: El evangelio del Reino de Dios. Este evangelio es un mensaje de esperanza, que anuncia una época en la cual la humanidad vivirá en paz y armonía, gobernada por Jesucristo.

¿Cómo se va a restaurar la Tierra?



Una crisis ambiental de proporciones mundiales amenaza poner fin a toda vida en la Tierra. El problema no se va a resolver con nuevas leyes, más tecnologías ni tratados internacionales. Mientras los gobiernos vacilan, a la humanidad se le agota el tiempo para hacer los cambios necesarios. Los peritos calculan que si persisten las tendencias actuales, ¡en tan solo 30 o 50 años, importantes extensiones de la Tierra quedarán inhabitables!

Esperemos las próximas plagas profetizadas



¿Por qué permitió Dios la pandemia de la COVID-19? La profecía dice que se avecinan pestes; ¿será esta una de ellas? ¿Y por qué permite Dios que padezcamos guerras, hambre y enfermedades; al punto de enviarlas deliberadamente en ciertos casos? ¿Tiene algún sentido todo esto?

Las anteriores preguntas tienen sus respuestas, pero si hemos de comprenderlas, primero debemos captar dos verdades esenciales.

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