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La semana pasada el presidente Jacob Zuma renunció bajo la presión de su partido, el Congreso Nacional Africano (CNA). El liderazgo del CNA amenazó con presentarle un voto de “censura” si no renunciaba voluntariamente a raíz de numerosos cargos de corrupción (Al Jazeera, 14 de febrero de 2018). El señor Zuma ha sido parte del CNA desde 1958 y pasó diez años en prisión junto al expresidente sudafricano Nelson Mandela.

Hace un par de semanas, Angela Merkel finalmente pudo armar un gobierno de coalición. Aunque algunos están felices, sus oponentes han criticado las concesiones que se vio forzada a hacer con el opositor Partido Socialdemócrata. Ahora, un número creciente de personas, incluso dentro del propio partido de la señora Merkel, piden el fin de su liderazgo (Financial Times, 13 de febrero de 2018). Muchos piden un liderazgo nuevo y más joven en Alemania.

Las sociedades secretas, como la Comisión Trilateral, Bilderberger, Illuminati, Burschenschaft y Opus Dei, son temas favoritos de la radio, sitios de Internet, libros y películas. Como lo demuestra la popularidad de películas taquilleras como "Enemigo del Estado", "Ángeles y Demonios" y "Apocalipsis 2012: El fin del mundo", así como la de los presentadores de programas de radio como Michael Savage, Glenn Beck y Alex Jones, la sociedad está fascinada por las teorías de conspiración y las organizaciones clandestinas que supuestamente manipulan a las masas.