Esta temporada trae consigo un tiempo para música hermosa, fiestas, diversión y tiempo en familia, también trae el caos anual en los centros comerciales, las tiendas por departamentos y ahora las compras por Internet.
Gran parte del mundo está atrapado en lo que se llama el "espíritu de la temporada", evidenciado por un frenesí en la compra de regalos, que a menudo endeuda más allá de sus capacidades a los compradores y llena los bolsillos de los comerciantes.