Hay un gran ecualizador en la vida humana, no importa quiénes somos o si somos ricos o pobres. Me refiero al tiempo. Cada uno de nosotros tiene 24 horas al día, ni un minuto más ni un minuto menos.
Tenemos muchas expresiones que giran en torno al tiempo: "el tiempo es la esencia"; "el tiempo es oro;" "el tiempo es corto"; "pasando el tiempo;" "matando el tiempo", y una expresión memorable en el libro de Efesios: "el cumplimiento de los tiempos".